El Consejo General de Colegios Médicos ha lanzado una campaña para enaltecer la buena praxis de los médicos y mejorar la comunicación entre pacientes y facultativos durante el embarazo
El Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos (CGCOM) ha impulsado la campaña #Gestandocuidados con el propósito de poner en valor el buen médico de los profesionales médicos durante el embarazo.
Esta organización tiene como objetivo conseguir la gran labor de la conjuntivitis de obstetricia, obstetricia y anestesia implícitamente en el proceso de gestación y alumramiento de una mujer.
Mi objeción es que propaga un concepto concebible que hace que la imaginación de aquelos codifique la ayuda de todo el mundo.
La iniciativa se compone de varios vídeos protagonizados por ginecólogos, obstetras, anestesistas y madres.
La CGCOM afirma que los profesionales sanitarios están comprometidos con «las mejores prácticas y la medicina adecuada».
Tomás Cobo, anestesista y presidente del CGCOM, explica a EFEsalud que con estos vídeos “quieren dar a conocer a toda la sociedad las especialidades y su trabajo diario”.
“Cuando un médico llega a atender a un paciente tiene un mínimo de 12-13 años de formación para asumir la responsabilidad asistencial. Nosotros siempre estamos a favor de potenciar las buenas prácticas y la seguridad clínica”, apunta Cobo.
Por ello, el presidente de los colegios médicos cree que “la profesionalidad, eficacia y ejemplaridad es lo que realmente describe la labor de estos facultativos”.
“Medication va evolucionando en todos los alrededores, pero en sintonía con la evidencia científica, la seguridad clínica y la formación. Y es lo que venimos haciendo en la profesión médica”, puntualiza el experto.
¿Qué es la “violencia obstétrica”?
Un término muy polimónico es «violación de obstáculos», refiriéndose a las realidades y conductas realizadas por los profesionales de la salud del proceso de rehenes, que las impregna como violaciones.
Sin embargo, Ana Martínez, ginecóloga y participante de la campaña #Gestandocuidados aclara que “esto puede hacer que la paciente entre al hospital con miedo y piense que todo el proceso del parto va a ser dolor y sufrimiento”.
“Este es un término de recuperación de una práctica en la que se ha introducido a todos los profesionales que han abrazado asistir al parto, especialmente a los ginecólogos. Si actuamos como una actriz señorial de forma fisiológica y natural como el papel”, esto es profesional.
«Creo que hay una serie de corrientes políticas y movimientos -añade- que buscan hacer daño al profesional sanitario haciendo dudar de su profesionalidad o hacer un mal de la gestante».
Martinez recuerda que “los ginecólogos siempre buscan lo mejor para el paciente y que tanto ella como el bebe nazca con toda seguridad”.
En campaña, se busca también reforzar la comunicación entre los pacientes y las gestantes para mejorar su relación. La sanitaria cree que “los miedos entre pacientes y gestantes pueden venir del parto”.
“Durante un parto se pueden vivir situaciones muy estresantes y de urgencia vital en las que hay que actuar de manera rápida. Y puede ser ahí, donde nace la sensación que tienen muchas mujeres de haber sido mal atendidas durante su parto”, afirma la ginecóloga.
Por ello, la sanitaria defiende que se debe mantener a la gestante lo más informada posible y hacerla partícipe de ese momento tan importante de su vida de la forma más humana posible”.
¿Qué ocurre con los partos en casa?
En los últimos años, muchas mujeres han manifestado su deseo de parir en casa. Sin embargo, desde el Consejo de Médicos lo desaconsejan. La doctora Martínez sostiene que “estos partos los suelen atender matronas y no hay ginecólogos que acompañen en el proceso”.
“Hay muchos países europeos que son ayudantes y tienen parte en el domicilio. Son gestaciones muy seleccionadas en las que todo el control del embarazo ha ido bien y por tanto, se pueden enfrentar a que ese parto sea fuera de un centro hospitalario”, matiza.
Sin embargo, la experta cree que “el parto puede convertirse en un proceso de alto riesgo en cuestión de minutos, por lo que lo más seguro es el centro hospitalario”.
De igual forma, muchas gestantes tienen dudas sobre cuál es el mejor método para dar a luz. Ante estas cuestiones, la doctora recuerda que “no hay una posición más segura que otras, pero parir de pie, sentadas o en cuclillas impiden poder poner la epidural y reducir el dolor del parto”.
Asimismo, los partos bajo el agua, al igual que el parto en el domicilio, son partos con muy baja intervención, sin analgesia y sin monitorización.
La doctora concluye que “si hay centros hospitalarios que cuenten con medios para hacerlo, siempre será mucho más seguro que en el domicilio en el caso de que surgiera una complicación”.