Los resultados del ensayo clínico Waterfall: «Fluidoterapia agresión o modera en pancreatitis aguda», artículo científico publicado en ‘The New England Journal of Medicine’, confirman que el tratamiento de la pancreatitis aguda con abundancia de sero en las primeras y días es perjudicial para el pronostico de los pacientes
(Izq-der). Lucía Guilabert (residente aparato digestivo), Enrique de Madaria, Pedro Zapater (farmacólogo clínico, asesor en estadística) y Alicia Vaillo (coordinadora del ensayo). EFE/Foto cedida
«Es un grave peligro para estas personas, hospitalizadas de urgencia por una crisis moderada o grave de la enfermedad», subraya, en declaraciones a EFEsalud, el Dr. Enrique de Madaria Pascual, responsable de Pancreatología del Instituto de Investigación Sanitaria y Biomédica de Alicante (ISABEL), organismo que ha dirigido el estudio internacional.
«La práctica clínica establecida en la rutina hospitalaria de que hay que poner muchos goteros -sero intravenoso con solución de Ringer- porque mejora el curso de la enfermedad y diminue las complicaciones, obteniendo así una mejoría, no es cierta», explica.
“Muy al contrario, se recarga el sistema circulatorio y no mejora la evolución; los pacientes incluso van a peor”, contrapone.
El estudio Waterfall ha demostrado que este tratamiento clínico se asocia a un aumento del 20,5% de las complicaciones cardiopulmonares en pacientes con pancreatitis aguda, que sufren mayores dificultades respiratorias, encharcamiento pulmonar o insuficiencia cardiaca por sobrecarga de líquidos en el sistema cardiovascular.
«En cambio, un tratamiento moderado con estos fluidos se asocia a solo un 6,3% de casos de supercargo cardiovascular y complicaciones respiratorias», señala.
De Madaria Pascual, especialista en el Servicio de Aparato Digestivo del Hospital General Universitario Doctor Balmis de Alicante (que engloba al ISABIAL), además de presidente de la Sociedad Española de Gastroenterología, aconseja, en consecuencia, «abandone cuanto antes esta practica clinica” que utiliza la abundancia de sueroterapia intravenosa.
El tratamiento de la pancreatitis aguda (AP), moderada o grave
La pancreatitis es una inflamación del páncreas, una glándula plana y agrandada que se encuentra detrás del estómago, en la parte superior del abdomen. Esta patología puede aparecer en su forma aguda, expresándose de manera repentina y durante algunos días, o en su forma más grave y crónica perdurando durante años.
Se caracteriza por la aparición de vómitos y dolor abdominal intenso que en dos de cada tres casos son leves, pero en el resto pueden sufrir complicaciones que afecten al páncreas u otros órganos, como los riñones o los pulmones.
“Llevamos más de 10 años estudiando sueroterapia en pancreatitis aguda y esta investigación supone, por fin, esclarecer definitivamente el papel de este agresivo tratamiento en pacientes ingresados en un centro hospitalario”, recuerda la doctora De Madaria, investigadora principal del estudio. .
Durante el ensayo clínico, con 249 participantes voluntarios de diez centros de salud de España, India, Italia y México, se suministraron ambas cantidades de suero intravenoso, abundantes o moderadas, dando como resultado La sueroterapia agresiva generó un 20,5% de complicaciones frente a sólo un 6,3% en los casos moderados..
Enrique De Madaria concluye que este «ambicioso» estudio obliga a cambiar en todo el mundo el manejo de la pancreatitis aguda, tercera enfermedad del aparato digestivo en cuanto a número de ingresos y que «forma parte del día a día de cualquier centro hospitalario».
Cascada ha sido financiado con la ayuda del Ministerio de Ciencia e Innovación a través de la Acción Estratégica en Salud del Instituto de Salud Carlos III, junto con las aportaciones de ISABIAL (uno de los centros acreditados por el ISCIII) y la Asociación Española de Gastroenterología (AEG).
Este ensayo clínico, controlado, aleatorizado y multicéntrico, que duró un año y medio, es el primer artículo médico original publicado en la prestigiosa revista Revista de medicina de Nueva Inglaterra (NEJM) impulsado por un centro de la provincia de Alicante, y se posiciona como el octavo ensayo clínico en gastroenterología liderado por un centro español.